jueves, 26 de junio de 2014



SONETO A LA LOCURA (Lorenzo Martín del Burgo)

Dioses de la locura, a mi  puerta  llamásteis,
y  yo  me equivoqué al abriros  mi  casa
y  yo  me equivoqué al  dejaros  sin  tasa
recorrer  los  pasillos de mi  razón. Llegásteis

y en seguida  os  hicísteis  los amos. Me cegásteis
con el  fulgor  insólito de vuestros  trajes de  oro,
con el  eco   jovial del  cascabel sonoro
que seguía  vuestro errático  deambular. Me dejásteis

derrumbado en  la  noche  más  obscura. Ni  estrellas
en  los cielos  ni  luces en  la  tierra. Por donde
vinísteis  os  marchásteis, dejándome a manera

de recuerdo de vuestro  caminar sin  huellas
en el  fondo del alma  un quejido  insomne
y  la risa   burlona de la  negra quimera.

domingo, 22 de junio de 2014

Clara Janés

Lo lejano está en mí,
en mi centro florece,
se extiende el manantial
en tierra firme,
en el ala de pájaro,
la cadena de fuego.
Todo se modifica
y genera el diamante
ebrio de aire
que alimenta y cobija
el vuelo hacia la nada.

sábado, 21 de junio de 2014


Se  van  los días  poco a  poco
y  yo  me  voy  de pronto
tras ese  otro  que  fui
tras ese  otro  que  soy.
Aparece el cansancio
de  los años que  se  soportan
y de  los que  nos  soportaron,
y en el alma  hay  un  dibujo
que no se  puede ver
pero se  puede  sentir.
Se  van  los  días  poco a  poco
y está  toda  la casa al  fin
llena de   huellas  y de  ojos.
Aparece el  cansancio
y ese  otro   que  fui
y que  ya  no seré.
Se  van  los  días,  solos.

miércoles, 18 de junio de 2014

Amada Belardo Paniagua

Va  y  viene el aire como
mis sueños,
van  y  vienen  los deseos
como  tu  cuerpo.
Mis sueños y  mis deseos
navegan  hasta
el  naufragio,
y en  tu  noche se refugian
hasta que reina el  olvido
en el  destino de ambos.
Van  y  vienen  los deseos
como  mis  sueños:
derrotados,
pero ETERNOS.
Atardecer en  Madrid
como sin  tiempo
con el  leve asombro
de  mis ojos  revelados
por  ti,  Soledad.

lunes, 16 de junio de 2014

Dónde  habita el  niño
que aún  vive en  mí,
dónde amanecerán  sus sueños,
dónde  tendrá  la noche
sosiego  para  él.
En qué  lugar hallarán
sus  manos  miel,
sus  ojos la verdad
no enturbiada / por  lo  falso.
Dónde habita el   niño
de valor  inmenso
que  yo  fui.
En qué  lugar
nos  hallaremos,
asombrados / por la muerte,
peregrinos  tal  vez.

Xavier Abril

Oigo  la  música de tu  cuerpo en  la  yema de mis dedos.

viernes, 13 de junio de 2014








nonudra

Un  atardecer  cualquiera
de  opalescente  transparencia
volverás como  llegan
los  pájaros al  nido
y  me darás  la  mano
evanescida  por el  tiempo
y  convergerá  tu  llanto
                     / con el   mío.

sábado, 7 de junio de 2014

Soy  el  que  no  soy,
el  que  acaso  no exista,
el escritor que no fue visto
ni  tiene generación
de ninguna clase,
en ningún aspecto.
Soy el que  no  soy,
el  niño de nadie
que  no  tuvo biblioteca
y  ahora  nada entre
libros y escritores,
pintores,  fotógrafos
y  p o e t a s.
Soy el que  no  soy,
la flor que no fue vista,
el amigo  del aire,
la luz que no hace
a  nadie  sombra.
Soy el que  no  soy,
el que acaso  no exista
y se perdone a sí  mismo
tanta locura interesada,
tanto  envite f a l s o.

jueves, 5 de junio de 2014

RAMÓN

Ramón,  congratulémonos de no sentir el símbolo ni la fábula. Así nos adelantamos con más ligereza, con más desembarazo y con más serenidad... Somos  menos  opacos sin esa resistencia del símbolo... Somos más  lingote de fundición y así  no somos  reacios a esa  ráfaga que  pasa  sobre  las cosas  para excederlas y   mundanizarlas...

miércoles, 4 de junio de 2014

.......
          V

¿Y tú qué haces ahí
fuera del circo, fuera
del mundo, contemplando
un elefante de papel pintado,
niño de nadie, niño
que jamás ha reído?

(José Ángel Valente, Del  Circo: Cinco  Fragmentos)

domingo, 1 de junio de 2014


De la plaquette "Homenaje a Federico García Lorca"

Vino  la luna
con  su  cuna
y su  luz encendida
para  mi  corazón
de espuma
y de romero.
Vino la luna
y se fue  luego
dejando  su alegría
en  los espejos
que me miran.
Vino  la luna
con su  cuna
y  se fue  sola
tras  mi  fortuna.


Ildo Tenorio

Escuchamos  la  música;  pero  la  música  lee en  nosotros.