Tengo sólo lo que le di a las palabras,
aunque ellas no sepan de la deuda
ni la dádiva.
Leí libros que se me fueron olvidando,
y amé a mujeres que no sé dónde habitan
ni qué estarán pensando.
Nunca me he definido, sino por mis retratos
o por mis silencios,
y se acercan ya las despedidas
a donde antes nacían los encuentros.
Tengo sólo lo que le di a las palabras
y los ecos que la vida
me ha brindado.
1 comentario:
Ay Pedro, voy pasando de puntitas, intentando silenciar mis pasos, pero la respiración me delata: encantada con tus letras, disfrutándolas tanto... Un abrazo... Ely.
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