lunes, 18 de julio de 2011

Se me fue el santo al cielo
y al cielo se fue él y ella
y todos los perros que se fueron
donde estarás siempre tú, el que no habla
y vosotros que no tuvisteis tiempo
para trataros con la vida.
Se me fue el santo al cielo
y quemé todos, todos los libros
en una hoguera imaginaria,
los dibujos de niño, los poemas
que nunca escribí ni escribiré.
Se me fue el santo al cielo
y al cielo se fue ella y él
y todos los perros que vivieron
en la memoria que nunca más volvimos a tener.
Se me fue el santo al cielo
y se quedó la casa, los recuerdos
y el bandoneón dormido de la pena.

No hay comentarios: